Se trata de un dolor en la parte externa de la articulación del codo, que nos llega a producir una impotencia funcional, y que si se abandonara sin tratamiento podía llegar a cronificarse y su tratamiento sería más complicado y así dificultar su curación.

Con el tratamiento con factores de crecimiento, conseguimos aliviar, llegando incluso a eliminar el dolor y también la inflamación, incorporándose a su actividad deportiva.